¡Hola! Soy Sarah MacMillan

Soy guía de transformación personal, E-RYT 500, YACEP, facilitadora de retiros espirituales y maestra de las Certificaciones de | Meditación y Devoción | Breathwork | Cuencos Alquímicos de Cristal | y Sonoterapia. 

Llevo más de 20 años en el camino del sonido y la meditación, y en el transcurso de la última década empecé a explorar los sentidos a través de la respiración consciente (breathwork), el sonido, los mantras y la voz como instrumentos de devoción para elevar la consciencia e incluso ayudar a sanarnos a nosotros mismos.

En el 2015 fundé Be Generation Love con la misión de inspirar a que las personas se conecten al silencio de sus corazones para que vivan una vida más amorosa, más balanceada, más consciente y con propósito.

Y en el 2021 nace Be Generation Love School (BGLS), una escuela holística que ofrece certificaciones profesionales para el alma, cuerpo y espíritu que te aportarán crecimiento, sanación y transformación personal.

Conóceme un poco más

Soy una persona buscando el balance entre la vida en este plano físico de proyección que sé existe en la mente y la vida de mi mundo interior. Es ese mundo interior, el desconocido, el que me llama, me seduce y me quita el sueño.

Me pasé muchos años buscando mi verdad. A los 20 años perdí a quién era un gran amor de una forma tan repentina que el shock de su muerte inundó mi vida de lágrimas y tristeza. Estuve medicada e internada por depresión clínica y pasé por múltiples terapias y cientos de visitas a psicólogos y psiquiatras. En esa época oscura de mi vida la práctica de la meditación y la carrera de música que estaba estudiando en la universidad me ayudaron a mantener de cierta manera un balance entre la depresión y mi vida. Estudiar diariamente con sonido me sostuvo así como lo hizo durante toda mi niñez cuando tocaba instrumentos, cantaba y escribía canciones, y la meditación me abrió una puerta hacia la exploración de mi espiritualidad.

A los 23 años empecé a buscar afuera la felicidad que anhelaba mi alma y monté mi primer negocio, un Day Spa exitoso llamado Meduhr en Miami. Empecé a invertir en propiedad raíz, trabajé con artistas y viajé por el mundo con ellos hasta que entendí que la felicidad que buscaba afuera jamás lograría llenarme el corazón para dejar de sentir tanto dolor. Así que en mi búsqueda de sanarme escuché la recomendación de mi terapeuta, y llegué sin expectativas a una terapia de respiración consciente (Breathwork), que logró lo que años de terapias no habían logrado y elevó mi entendimiento de este poder que tenemos cada uno y que no conocemos. Aprender a mover la energía estancada en mi cuerpo y hacer un detox emocional a través de mi respiración me sanó tristezas, dolores, traumas, vacíos y liberó todas las emociones sin procesar que llevaba cargando durante años.

Me pasaría los próximos 5 años de mi vida trabajando en mí, leyendo, estudiando, meditando con más constancia, terminando una relación tormentosa en la que me había metido en medio de mi depresión y sanando todos los rincones de mi vida que habían quedado heridos después de caminar por el camino de la víctima.

Después de años de trabajo personal y espiritual me encontré en el silencio de mi corazón y desde entonces quedé tan impactada con todo lo que vi y sentí que el llamado de mi mundo interior le ganó a todo lo otro que inundaba mi vida. En esa misma época conocí a Rodrigo, un hombre que cambiaría muchas de mis creencias acerca de las relaciones y que me volvería hacer creer en el amor. Nos casamos y después de ser empresaria y de tener la vida de mis sueños, decidí vender mis negocios cuando supe que iba a tener gemelas. Todas mis creencias entraron a cuestionarme ¿“Qué le voy a enseñar a mis hijas”? se convirtió en una pregunta constante y poco a poco fui cambiando mi estilo de vida para que fuera coherente con lo que quería que ellas vivieran en su día a día.

Me certifiqué como maestra de yoga en el Yoga Institute, y luego estudié 300 hrs más de avanzada con Cyndi Lee. Empecé a dar más de 13 clases de yoga a la semana y empecé un grupo de meditación en mi casa que comenzó a crecer, enamorándome más de esta práctica e inspirándome a certificarme como Maestra de Meditación del Sonido Primordial en el Centro de Chopra, y también con la técnica ancestral de Paramahansa Yogananda.

El yoga y la meditación me hicieron explorar la respiración, y decidí aprender estas técnicas maravillosas que habían sanado mi depresión años atrás y me certifiqué en varias técnicas incluyendo Soma Breath y la de David Elliot entre otros. El estudio de la voz, la vibración de los mantras y el sonido de los cuencos alquímicos me han llevado a estudiar con maestros como Dr. David Frawley, Yantara Jiro, Silvia Nakkash… y por lo visto la exploración jamás cesará.